América Latina, ciudad, voz y letra
Ver/
Fecha
2006Autor
Gilman, ClaudiaResumen
Un lector habituado a la insistente definición del intelectual que Ángel Rama formula desde las páginas del semanario Marcha en la década de 1960, podría pensar que La ciudad letrada es un libro cuya autoría ha sido erróneamente atribuida al crítico uruguayo. Ese lector no es necesariamente un obcecado ni un nostálgico: busca una coherencia que, de hecho, no encontrará entre esas dos versiones contrapuestas del intelectual de uno y otro Rama. En efecto, quien repitiera en varias ocasiones que el intelectual es el único capaz de operar la palingenesia de la sociedad, se aboca, en La ciudad letrada, a vincular fuertemente la figura del letrado con una doble posesión (saber y poder) que lo convierte en una figura que reproduce toda forma de dominación, en cualquier período histórico que se considere. Llama la atención el hincapié de Rama en caracterizar al mundo letrado como servidor, sin fisuras, del statu quo y causante de la separación (sobre la que habremos de volver luego) entre la ciudad letrada y la ciudad que denomina real.