Presentación del dossier
Abstract
Es preciso analizar la relación entre conflictos sociopolíticos y los modelos de acumulación económico-políticos; un supuesto que funge como una hipótesis investigativa contextual para abordar las contradicciones relacionales. El escenario neoliberal latinoamericano, desde los años setenta y ochenta, y más intensamente desde los años 1990, ha reconfigurado la conflictividad regional de forma y de fondo, claramente expresado en el proceso de organización de fuerzas sociales en general y la articulación de movilización social en particular. Las nuevas dinámicas de acumulación exógena reemplazaron el modelo sustitutivo de importaciones, atrayendo significativamente capitales con la rentabilidad de los recursos naturales subcontinentales y un renovado modelo extractivo-primario basado en hidrocarburos, minerales, biodiversidad y alimentos, dentro de un marco económico hegemónico que reestructuró las instituciones y los aparatos de poder para efectuar las reformas orgánicas necesarias. A la par, el paradigma ideológico neoconservador menguó las teorías que enfatizan los enfoques dependencia-periferia, impulsando políticas que privilegian la estabilidad monetaria y fiscal mediante la desestatización en el sector social y la reestatización en políticas de mercado, priorizando el libre flujo de capitales. Estos últimos han sido progresivamente menos industriales y más financiero-especulativos (por lo tanto, improductivos, depredadores y volátiles) mientras las políticas económicas han impulsado más los capitales privados que los estatales, asimismo los transnacionales sobre los nacionales. Consecuentemente, observamos una nueva división internacional de trabajo, así como crecimiento económico subordinado internacionalmente.