México : ¿todo lo social se desvanece?
Abstract
Sin duda la imagen que mejor expresa la situación por la que atraviesan una serie de países no centrales, fuertemente expuestos a procesos de apertura y globalización, es la de un desorden generalizado que está conduciendo a una fragmentación de la escena social y a una pulverización de las identidades colectivas. Indonesia, Colombia, México, Centroamérica, Venezuela, la propia Rusia, Argelia, para ya no citar otros casos más dramáticos de desmantelamiento institucional, están llamando la atención sobre el desorden acelerado y la forma abrupta y poco inteligible con que ha irrumpido el proceso de globalización y las poderosas leyes del libre mercado
mundial. Esto se agrava cuando se trata de agregados sociales mal protegidos geográficamente, mal prepara dos técnica y culturalmente para acoplarse a esos nuevos ritmos y en donde, además, no se han aplicado políticas compensatorias (como fue el caso en la Comunidad Económica Europea para aminorar las desigualdades entre los países que se fueron integrando al pacto regional). Muy lejos de esto, en los países de la globalización salvaje, ninguna fuerza, ni el Estado nacional mismo, se preocupa por integrar a esos enormes conglomerados poblacionales, igualmente característicos de los sectores populares que de los sectores medios, arrasados por el nuevo desorden mundial.