Crítica erudita y exaltación antifascista : acerca de la obra de José Ingenieros “historiador”
Abstract
A mediados de la década de 1930, cuando los sectores intelectuales de la izquierda argentina comenzaban a ver en la estrategia de los frentes populares una salida para el sistema político local que frenara el desarrollo de lo que denominaban el fascismo criollo, articularon esa operación con una serie de discursos y afectividades ideológicas que pretendían instalar los nuevos deseos sobre el destino político argentino, en función de una apropiación de la iconografía y las temáticas de la tradición liberal en la que aquélla aparecía como la dimensión genealógica que otorgaba una doble legitimitad: la de incluir el devenir de la política local en el horizonte de un futuro donde la URSS aparecía como el modelo sustitutivo de progreso en tanto nuevo humanismo, y, por otra parte, la de otorgar una identidad institucional en el ámbito de la cultura a unos “intelectuales nuevos”, quienes a partir de ciertos agrupamientos de carácter antifascista (como la Asociación de Intelectuales, Artistas, Periodistas y Escritores, 1935-1943 – AIAPE – y otros ateneos satélites), encontraron el lugar de acceso a la cultura.