Anthony Giddens, Consecuencias de la Modernidad, Madrid, Alianza, 1993, 166 páginas.
Resumen
El propósito de esta obra, gestada sobre aportes realizados a la Universidad de Stanford en el año 1988, es producir un análisis institucional de la modernidad.
Anthony Giddens desplaza el acento, que la perspectiva denominada posmoderna coloca usualmente en el dominio filosófico y epistemológico, para situarlo en un escenario en el que los nuevos acontecimientos desbordan la capacidad de comprensión y de control de sus actores. Giddens se opone a vincular la posmodernidad con el fin de la búsqueda de fundamentos epistemológicos y a la
deconstrucción de la idea de progreso (Lyotard). Estas fueron las dos dimensiones del definiens de posmodernidad con mayor predicamento en el marco de una perspectiva que señalaba el eclipse de los “grandes relatos". El argumento opuesto, y simétrico, sostenía como posible una epistemología fundamentada y la elaboración de un conocimiento social de validez general (Habermas). En esta polémica Giddens introduce un desvío novedoso, pues se opone a abandonar el estudio minucioso de la propia modernidad.