Isidoro Cheresky y Jean Michel Blanquer (comps.), ¿Qué cambió en la política argentina? Elecciones, instituciones y ciudadanía en perspectiva comparada, Rosario, Ediciones Homo Sapiens, 2004, 321 páginas
Abstract
El estado de malestar ciudadano canalizado electoralmente en los comicios de octubre de 2001 a través de un alto porcentaje de abstención, votos anulados y votos en blanco, y puesto de manifiesto de manera dramática en los sucesos de diciembre de ese año parecían dar pruebas concluyentes de la existencia de un abismo: el que se extendía entre “la gente” y la política. La frase que fue consigna de este estallido, y del movimiento asambleario que se asumía como su heredero no hacía sino avalar tal presunción.
Sin embargo, el “que se vayan todos” –leído por muchos analistas como un rechazo pleno a la política–se transformó, apenas un año y medio después de su masiva enunciación, en la renovación de la confianza ciudadana en un gobierno surgido del juego político tradicional, siendo en este proceso la figura presidencial el polo en el cual se han conjugado las esperanzas.